El entierro de la sardina carnavalesco se celebra tradicionalmente el miércoles de Ceniza y en él se entierra simbólicamente al pasado, a lo socialmente establecido, para que puedan renacer con mayor fuerza, para que surja una nueva sociedad transformada.
Asi que dicho y hecho, acompañando a la sardina de Villanueva de la Torre iba un pedacito de nosotros, de nuestra energía:
y nuestra sardina villanovense:
y nuestros pobres viudos que dejaron el chandal aparcado para ir a despedir a la sardina:
y como toda celebración de fiesta tiene una única finalidad, y no es solo comer y beber ehh, es disfrutar y compartir: